La testosterona es una
hormona producida principalmente por los testículos (aunque las mujeres tienen
testosterona, también). En los hombres, la testosterona juega un papel clave en
el incremento de la masa muscular y ósea, es esencial para la salud y el
bienestar y en la prevención de la osteoporosis. A partir de los 30 años, de un
hombre, los niveles de testosterona comienzan a disminuir, y seguirá haciéndolo
a medida que envejece. Por otro lado, hay muchos medicamentos y químicos que
disminuyen su producción, como las estatinas usadas en pacientes con
hipercolesterolemia.
Además del uso de
hormonas en casos de necesidad, existen formas naturales, con cierta
efectividad, de controlar la disminución de los niveles de testosterona con la
edad.
1. Bajar de peso
Los hombres con sobrepeso
son más propensos a tener niveles bajos de testosterona.
2. Ejercicio de alta
intensidad (especialmente combinado con el ayuno intermitente)
Tanto el ayuno intermitente
como el ejercicio de alta intensidad pero breve, se ha demostrado que aumentan
la testosterona.
El ayuno intermitente lo
hace mediante el aumento de la expresión de hormonas de la saciedad incluyendo
la insulina, la leptina, la adiponectina, péptido similar al glucagón-1
(GLP-1), colecistoquinina (CKK) y melanocortinas.
El ejercicio de
intensidad puede ser relativamente fácil de conseguir. Vamos a poner un ejemplo
de ejercicio útil y sencillo.
• Calentar durante diez minutos
• Ejercicio de máxima intensidad durante 30 segundos (por
ejemplo, un sprint largo).
• Recuperar a un ritmo lento a moderado durante 90 segundos
• Repetir el ejercicio de intensidad alta y así hasta 8 veces.
Como se puede ver, todo
el entrenamiento dura tan sólo 30 minutos, de los cuales solo 4 son de alta
intensidad y el resto es de recuperación.
3. Dieta rica en Zinc
Está demostrado que la
restricción de fuentes dietéticas de zinc conduce a una disminución
significativa de la testosterona, mientras que la administración de suplementos
de zinc la aumentan en personas con déficit leve. En este sentido, se estima
que hasta un 45 por ciento de los adultos mayores de 60 puede tener ingestas de
Zinc por debajo de las recomendadas. La dieta es la mejor fuente de zinc, de
esta forma, junto con los alimentos ricos en proteínas como las carnes y los
pescados, otras buenas fuentes dietéticas de zinc incluyen la leche cruda,
queso crudo, legumbres y yogur o kéfir elaborado con leche cruda. En este
sentido, los vegetarianos pueden tener un ligero déficit. Si se decide a tomar
suplementos, evite una ingesta de zinc superior a 40 mg al día, ya que
demasiado zinc puede interferir con la capacidad del cuerpo para absorber otros
minerales, especialmente cobre, y puede causar náuseas como efecto secundario.
4. Ejercicios de Fuerza
El entrenamiento de
fuerza también se sabe que aumenta los niveles de testosterona, a condición de
que lo están haciendo con intensidad suficiente. Hay que aumentar el peso y
reducir el número de repeticiones o emplear ejercicios que recluten gran
cantidad de grupos musculares. También se puede enlentecer el movimiento para
conseguir el mismo efecto con menos carga en personas con lesiones o dificultad
específica.
5. Aumentar los niveles
de vitamina D
La vitamina D, es una hormona
esteroide, esencial para el desarrollo sano del núcleo del espermatozoide y
aumenta los niveles de testosterona. En un estudio, los hombres con sobrepeso
que recibieron suplementos de vitamina D tenían un aumento significativo en los
niveles de testosterona después de un año. El déficit de vitamina D se
encuentra actualmente en proporciones epidémicas en los Estados Unidos (en los
estudios publicados) debido a la falta de exposición al sol. En nuestro país,
en invierno y en muchas regiones, la situación es similar. Por ello, el primer
paso para asegurar que está recibiendo todos los beneficios de la vitamina D es
averiguar cuáles son sus niveles plasmáticos.
Hace unos años, el nivel
recomendado era de entre 40 y 60 nanogramos por mililitro (ng / ml), pero más
recientemente el nivel óptimo de vitamina D se ha elevado a 50 a 70 ng / ml.
Para obtener sus niveles
en el rango saludable, la exposición al sol es la mejor forma de optimizar sus
niveles de vitamina D (exposición de una gran cantidad de su piel hasta que se
vuelve el tono más claro de color rosa).
Como último recurso, se
puede tomar un suplemento de vitamina D3
6. Reducir el estrés
Cuando se está bajo mucho
estrés, el cuerpo libera altos niveles de la hormona del estrés cortisol. Esta
hormona en realidad bloquea los efectos de la testosterona, presumiblemente
porque, desde un punto de vista biológico, las conductas asociadas a la testosterona
(apareamiento) son contrarias a la supervivencia inmediata ante la situación de
agresión por un depredador.
En el mundo moderno, el
estrés crónico , y los niveles elevados de cortisol, posteriormente, podría
significar que los efectos de la testosterona están bloqueados en el largo
plazo, que es lo que queremos evitar.
7. Eliminar el azúcar de
su dieta
Los niveles de
testosterona disminuyen después de comer azúcar, que es probable porque el
azúcar conduce a un nivel alto de insulina, otro factor que conduce a niveles
bajos de testosterona.
Sobre la base de las
estimaciones del USDA, el estadounidense promedio consume 12 cucharaditas de
azúcar al día, lo que equivale a cerca de dos toneladas de azúcar durante toda
la vida.
8. Comer grasas saludables
Una dieta especialmente
baja en grasas o desequilibrada en favor de los ácidos grasos n6 es
desaconsejable desde muchos puntos de vista, pero, particularmente, desde el
que estamos tratando, también lo es.
9. Aumente su consumo de
aminoácidos de cadena ramificada (BCAA) de los alimentos como de proteína de
suero de leche
La investigación sugiere
que los BCAA dan lugar a niveles más altos de testosterona, especialmente
cuando se toma junto con el entrenamiento de resistencia.
En este sentido, un
suplemento derivado de la leucina, el HMB es particularmente útil.
(Enlace)
No hay comentarios:
Publicar un comentario